¿Por qué los telediarios son colecciones de sucesos?

Hoy he llegado a casa a las 9, justo para ver el telediario de la noche.

Da igual cualquiera cadena nacional, pública o privada. Asumimos como algo natural que los telediarios sean una colección de sucesos terribles: mujeres asesinadas por sus parejas, ataques terroristas, espeluznantes incendios o huracanes, accidentes de tráfico mortales, niños atropellados, golpeados, maltratados... Y para terminar, un poco de fútbol.
Cuando se trata de resumir en 30 minutos la actualidad local, regional, nacional e internacional, ¿qué sentido tiene centrarse casi exclusivamente en dramas humanos absurdos y salvajes, de los que nada podemos aprender ni seguramente remediar? Tal vez esas "noticias" capturen audiencia alimentando el morbo y sean relativamente baratos (¿qué fue de aquellos corresponsales que nos explicaban lo que estaba ocurriendo en el resto de Europa, en los Estados Unidos, en Iberoamérica, en Asia o en Oceanía?).
Sin embargo, tantos sucesos sirven para muy poco. Nos acaban insensibilizando. Sabemos que la autoconfianza de la población está basada en la calidad de las informaciones que recibe (si todo son malas noticias, se sentirá incapaz de mejorar la stuación) y que el imperio de la inseguridad y el terror beneficia a quienes asumen el papel de protectores.
Espero que alguna de las cadenas de TV tome nota, equilibre sus informativos (también a lo argo del día hay motivos para sentirse orgulloso de la especie humana) y me tendrá como un fiel espectador.