Un país (todavía) mal educado

La prensa de hoy se hace eco del informe Panorama de la Educación 2007 presentado por la OCDE. Una vez más, los datos nos recuerdan que nuestro país está a la cola en lo que a educación se refiere.
Con un 64% de la población española entre 25 y 34 años que ha finalizado los estudios secundarios superiores, estamos en el puesto 25º entre los 29 países de la OCDE analizados, muy lejos de la media del 77% y del promedio de la Unión Eurpea, que es el 79%. Respecto a la Formación Profesional de grado medio, en nuestro país sólo un 36% de alumnos elige esta opción, en tanto que la media de la OCDE es del 48% y el promedio de la UE, del 54%. Esto provoca que en la OCDE los titulados universitarios ganan un 25% más y tienen una tasa de paro 7 puntos menor que quienes no han pasado del segundo ciclo de secundaria, pero en España no hay tanta diferencia entre lo que ganan los universitarios y el resto de los ciudadanos.
Hay motivos para la esperanza: este 64% de finalización de estudios es 3 puntos superior al año pasado y, en la última década, el gasto público en educación superior ha crecido en España un 62% frente al 9% de la OCDE. Hoy el 40% de los españoles entre 25-34 años es universitario, en tanto que en sus padres (55-64 años) se reduce al 14%. El informe destaca que nuestro país es uno de los más igualitarios en términos de educación, puesto que el 40% de los estudiantes universitarios procede de familias cuyo progenitor carece de un empleo cualificado.
Queda mucho por hacer. Otro informe del Círculo de Empresarios de marzo destaca que la competitividad española depende en gran medida del impulso de la formación profesional. Y el de la OCDE pone como modelo a los países nórdicos, en los que la formación es netamente personalizada. Tenemos entre todos que apostar por un FP prestigiosa, de calidad y muy útil.