El final de un Coaching

Esta mañana, en Barcelona, he disfrutado de la conclusión de dos procesos de coaching estratégico de directivos de una de las mejores empresas para trabajar (figura en los ranking de las empresas preferidas sistemáticamente). Es importante que el desarrollo personalizado se inicie y se cierre convenientemente, para evitar coach-dependencia. Con cada uno de estos ejecutivos hemos revisado los distintos objetivos de coaching y su grado de cumplimiento. Después nos hemos ido los tres a comer, a celebrar este proceso.

Mi amigo Sergi me ha regalado sus diez frases preferidas respecto al aprendizaje:
1. El mundo está enfermo de tristeza.
2. ¿Qué eliges ser en la vida: espectador o protagonista?
3. Dirige con la mente y lidera con el corazón.
4. Trata a un hombre como lo que es y seguirá siendo lo que es…
5. Somos gestores de actitudes.
6. Quien no tiene objetivos en la vida, trabaja para los que sí tiene.
7. Eres una S.A. con un solo accionista, preocúpate para incrementar el valor de tus acciones.
8. Si quieres pasar de la infancia a la madurez debes saltar por encima del valle de las excusas.
9. Tú no eres responsable de la cara que tienes, pero sí de la cara que pones.
10. Hoy es el primer día del resto de tu vida.
Grandes frases, que dan que pensar y sirven para avanzar en la vida.

Me ha interesado de la prensa de hoy el retrato del uruguayo Martín Lasarte, técnico de la Real Sociedad que ha conseguido el ascenso a primera, en Marca.
“Fue contratarle para devolver a la Real Sociedad a Primera división y Martín Lasarte no ha fallado. Lo que no lograron ni Coleman ni Juanma Lillo, aunque el tolosarra se quedó muy pero que muy cerca en su primer año, lo ha conseguido al tercer intento este técnico uruguayo de ascendencia guipuzcoana, que ha sabido dotar a la Real de su espíritu y su sello de campeón, junto a su equipo de trabajo.
Además, ha llevado a la Real a la máxima categoría como campeón de la División de Plata, un título más para su palmarés y para el del club donostiarra a falta de una jornada por disputarse. De hecho, es la sexta vez que la Real Sociedad se proclama campeón de Segunda división, tras los títulos conseguidos en las temporadas 39/40, 40/41, 42/43, 48/49 y 66/67.

LASARTE, A MARCA HACE UN AÑO
"Es un desafío precioso intentar el ascenso con la Real; no voy a San Sebastián a hacer amigos, sino a lograr ese objetivo. No vale nada más que conseguirlo"

Como jugador ya había ganado en su país una Copa Intercontinental y una Libertadores, entre otros muchos títulos, mientras que como entrenador había conquistado dos ligas de Uruguay y un ascenso con el River Montevideo hace justo seis años. Y ha sido llegar a Donosti, la tierra donde nació su padre, y devolver al octavo mejor equipo de la clasificación histórica de la División de Honor al sitio que se merece y en el que competirá la próxima temporada por 64 ocasión, tras cerrar su periplo en la División de Plata, en la que ha completado su campaña número 16.
Así, Martín Lasarte puede decir orgulloso que ha logrado el objetivo que se marcó cuando fue presentado como nuevo entrenador de la Real el pasado 22 de junio de 2009: dirigir al club 'txuri urdin' en Primera. El uruguayo, que fue una apuesta muy arriesgada del Consejo, firmó un contrato de una temporada prorrogable por otra... sólo en caso de ascenso y es evidente que se ha ganado la continuidad.
"Sé que tengo un revolver con veintidós muescas y sólo tres balas. ¡Ojalá las aproveche y dentro de un año celebremos el ascenso!" Dicho y hecho
Ya dejó muestras de su sinceridad en una entrevista concedida a MARCA justo un día antes de ser presentado. "Es un desafío precioso intentar el ascenso con la Real Sociedad. No voy a San Sebastián a hacer amigos, sino a lograr ese objetivo. No vale nada más que conseguirlo. Sé que tengo un revolver con veintidós muescas y sólo tres balas. ¡Ojalá las aproveche y dentro de un año celebremos el ascenso!". Y un año después, a falta de nueve días, lo ha conseguido.
Dicho y hecho. El entrenador charrúa llegó muy cuestionado por no conocer la categoría, pero a las pocas semanas de empezar a trabajar ya dejó muy claro que iba a darle al conjunto 'txuri urdin' aquello que más necesitaba: motivación y carácter.No tuvo un comienzo fácil, ya que Lillo había dejado una gran huella en el vestuario y en el entorno, que tenía dudas de cómo podía responder la Real con un técnico de fuera y unos fichajes sin mucho pedigrí -De la Bella llegó del Sevilla Atlético, Johnatan era un colombiano desconocido y las experiencias anteriores de Bueno en Europa no habían sido muy exitosas-, pero poco a poco se ganó su confianza.”

Las cinco muestras de gratitud de hoy: a estos dos directivos, que han trabajado durante los últimos seis meses para mejorar; al director de RR HH de esta compañía, por darme y darles la oportunidad; por la estupenda comida que hemos compartido y a Zoe, mi hija, por la alegría que pone en todo.