¡Cómo disfruté
ayer con los alumnos del Master para emprendedores del Instituto Pensamiento
Positivo en su tercera edición! Emprendedores puros (“personas enganchadas a un
proyecto vital”, según la definición que más me gusta de emprendedor/a).
Talentos que piensan en términos de oferta (qué pueden ofrecer como valor a la
sociedad), que empiezan a ser conscientes de su elemento diferencial y que se
sienten más cómod@s en el talentismo (la nueva era en la que el talento es más
escaso que el capital) que en el capitalismo anterior.
El talentismo
es una era conceptual. Por tanto, debemos manejar nuevos conceptos. Un concepto
poderoso es el del edutenimiento (en inglés, edutainment), la combinación de
educación y entretenimiento. El término procede de los 90, del diseño,
producción y uso de software para niños y jóvenes: programas que servían de
entretenimiento y aprendizaje. De hecho, podemos pensar que a lo largo de la
historia ha habido numerosas iniciativas de edutenimiento (las fábulas de Esopo,
las parábolas de la Biblia, etc); Walt Disney ya empleó la palabra en 1948 su
serie True Life Adventures. En la
década de los 70, distintos programas sociales y de salud lo utilizaron y más
concretamente Robert Heyman (National Geographic, 1973), el Dr. Chris Daniels
(Proyecto Millenium, 1975), Craig Sim Webb e incluso Al Gore (Una verdad incómoda).
En esta nueva
era, tenemos que establecer un puente entre lo divertido (el talento es
disfrute) y lo didáctico. A un lado, el entretenimiento de escaso valor (que
abunda en la televisión); al otro, la educación aburrida.
¿Hay una
secuencia? Sin duda. En primer lugar, la actividad ha de ser entretenida (la
obra de arte es algo que conmueve, que emociona, que moviliza los
sentimientos). En segundo lugar, casi inmediatamente, debemos aprender de ello
algo valioso para nuestras vidas.
Quiero ponerte
cuatro ejemplos. Dos exposiciones como la de El arte en guerra que (todavía) puedes disfrutar en el Guggenheim.
Un impacto muy notable (sobre todo, si tienes el privilegio de que te lo enseñe
una excelente guía como Lucía; así nos ocurrió a los ponentes del último Cine
Fórum Empresarial APD en Bilbao) que creo que debe ser complementado con el
catálogo de la exposición (una maravilla). De Picasso y sus coetáneos, del intento
obsesivo de los nazis por ajustarse a un arte realista, de Marcel Duchamp y su
arte conceptual, de la necesidad de expresarse artísticamente en los campos de
concentración, podemos aprender mucho en esta crisis.
Una gran
exposición es la de Salvador Dalí en el Reina Sofía de Madrid: “Dalí. Todas las
sugestiones poéticas y todas las posibilidades plásticas”. El genio de Cadaqués,
además de impactarnos, puede enseñarnos mucho.
El tercer
ejemplo es el poemadelunes de Yolanda
Sáenz de Tejada, ayer:
Cada uno ha de
amar como le nazca pero,
por encima de
todos los principios
(y los finales)
ha de respetar
la forma de amar del otro.
Creo que es lo
más valioso que he aprendido en los últimos años.
Este poema va
dedicado a aquellas amigas a las que llamo amigashermanas y a las que
amo con locura.
Gracias a ellas
mi vida es especial y libre.
Porque ellas me
apoyan
aunque esté
loca;
(ellas saben
que la cordura, la mayoría de las veces, sirve para volverte idiota).
Eso sí,
una
amigahermana, siempre te dice la verdad;
aunque
hiera.
¿El premio?:
que ella te lame las heridas...
A las que aún
estáis a mi lado y,
por qué
no,
a las que os
fuisteis,
porque un día
este poema fue vuestro, igual que esta sangre que me corre.
Pero sobre
todo, a las que viven en mi presente continuo, que es mi estado natural de
vivir.
Gracias
eternas.
Vivimos en la sociedad en la que más se
puede aprender de todo y de todos, si enfocamos convenientemente la mirada y
aprovechamos la información, la sensación, la experiencia para el aprendizaje y
la sabiduría.
Mi agradecimiento
a quienes nos aportáis, desde el entretenimiento, la base del edutenimiento.