Domingo de entrenamiento de fútbol de
Zoe y de comida en casa de mis padres. Nuestra amiga Marta nos regaló un
“Isidrín”, para beber la sidra como si la estuvieran escanciando en Asturias, y
lo hemos disfrutado con gusto. Gracias, Marta, por el regalo.
He estado leyendo el número de este
mes de la revista Muy Interesante, una de mis publicaciones fijas. En portada, “100
consejos para vivir 100 años. La ciencia demuestra que pequeños cambios en tu
hábitos pueden alargarte (mucho) la vida”.
El dossier de Elena Sanz, que
recomienda la web de Jay Olshanky (Universidad de Illinois) y el libro
“Aferrados a la vida” de Jonathan Weiner, nos aporta un centenar de consejos
para llegar a centenari@s:
A) Estrechamiento de las arterias
coronarias, cuidado con la hipertensión a partir de los 45 años, las personas
más inteligentes son más longevas, cuidado con la ingenuidad (no el optimismo
inteligente, sino no cuidarse) porque acorta la vida, no gruñir, visitar más al
médico (en Japón lo hacen 13’4 veces al año, el triple que en Europa),
estudiar, tocar un instrumento, no dispersarse, huir de las grasas saturadas,
ser eterno aprendiz, rodearte de amig@s, sentirte joven (percepción subjetiva),
un vaso de leche al día, no ser fumador pasivo, saber idiomas (dos o más),
evitar la depresión, cultivar aficiones, fitness mental, cultivar una vida
digital, no pasarte de calorías, deporte, tai-chi, malabarismos, kárate.
B) Respirar aire puro, no quedarse
con las ganas de practicar sexo, relaciones más de 3 veces por semana, olores
agradables, bombear el cerebro, moverse, apuntarse a un vuelo espacial, no
fumar, estar un máximo de tres horas diarias sentados, running, yoga, dormir lo
adecuado, no correr maratón pasados los 50, las responsabilidades, no tener una
estatura elevada, cierta exposición al frío, mantener a raya el colesterol malo
(LDL) y el azúcar, dar buenos apretones de manos, usar protector solar, la
sirtuina-1, el klotho, la melatonina, el Apo E.
C) La dieta mediterránea, los frutos
secos, los polifenoles, el café, un buen desayuno, las frutas y verduras, los
antioxidantes, las manzanas, el zumo de granada, una copa de vino, el pan
integral, cuidar la línea, un régimen hipocalórico, el aceite de oliva virgen,
los arándanos, el pescado azul, la Raíz de oro, el té verde, té blanco, las
pipas, la coenzima Q10, los aminoácidos, la dietas Polymeal (chocolate, vino,
frutas y verduras, ajo), las nueces.
D) Y finalmente ser feliz (gozar de
la vida), la siesta de 45 minutos, la cara de niño, el voluntariado, tener más
hijos que hijas, el buen clima laboral, mudarse a Okinawa (Japón), tener un
ingreso medio-alto, ganar premios, practicar actividades de ocio saludable,
leer asiduamente, vivir en zonas de cierta altitud, discutir civilizadamente,
asistir a misa, las nalgas voluminosas, seguir un horario, arriesgarte (una
personalidad activs, sociable y audaz), ser am@ de casa, presentarte a unas
elecciones, estar felizmente casad@, contar con una mascota, evitar la delgadez
extrema, la fama, el desempleo y la soledad.
Como ha escrito David Ponce en
Facebook, la salud es una ecuación con cuatro ingredientes: alimentación
idónea, ejercicio físico tonificante, descanso reparador y estabilidad
emocional. Analiza tus fortalezas y aprovecha tus oportunidades de mejora.
Elena Sanz también en “Muy
Interesante”, nos explica “¿Por qué el tiempo no pasa siempre a la misma
velocidad?”. La percepción en los seres humanos depende del asombro, la
motivación, el mañana (el futuro siempre está más cerca que el pasado), la
edad, el miedo y la depresión. Ya sabes, se trata de fluir.
Y las preciosas fotos premiadas en la
sexta edición de los International Loupe Awards.
En “Fotogramas”, además de la
películas del próximo mes de abril, un recuerdo a Harold Ramis, que falleció el
pasado 24 de febrero. En su filmografía, la magistral “Atrapado en el tiempo”
(1993), el repetido día de la marmota de Phil Connors. Y también “Una terapia
peligrosa” (1999), con Robert de Niro y Billy Cristal, así como su secuela, dos
años después. El actor de “Los cazafantasmas” (1984) fue un genio de la comedia
como guionista (“Desmadre a la americana”, “Los incorregibles albóndigas”, “El
pelotón chiflado”, “Los cazafantasmas”) y director (además de los mencionados,
“Al diablo con el Diablo”, “La cosecha de hielo”, “Año cero”).
Para el mes entrante, “Noé” (me fío
de Darren Aronofsky, director de “Cisne negro”), tal vez las “Crónicas
Diplomáticas” de Bertrand Tavernier y, en función de que Zoe quiera, “Río 2” o
“Spiderman 2”. Va a ser difícil elegir, y no por exceso sino por escasez.