Comienzo esta semana tan viajera que me va a
llevar a cinco comunidades autónomas en La Coruña. Jornada de reuniones y
procesos de coaching para volver a Madrid esta noche.
De la prensa de ayer domingo, varios
artículos que invitan a reflexionar.
Mo Gawdat, ingeniero ejecutivo de Google,
considera que ha descubierto el algoritmo de la felicidad. Cuando parecía que
lo tenía todo en la vida, perdió a su hijo Alí (21 años) en una sencilla
operación. Devastador. El algoritmo en cuestión es restar a lo que esperas de
la vida la realidad actual. Mo utiliza la metáfora del vaso medio lleno
(optimismo) o medio vacío (pesimismo) y nos propone agradecer el agua que
tenemos. “Ya no sabemos distinguir entre diversión y felicidad”, explica. La
primera son momentos pasajeros de euforia que camuflan nuestro verdadero ánimo.
La felicidad es un estado permanente y pacífico: “Me gusta el mundo tal como
está”. Todo ello lo explica en su libro, ‘Solve for happy’ y en sus vídeo
‘Engineer your path to Joy’ www.youtube.com/watch?v=AT9lD8TGyiM
Su algoritmo es Aristóteles (la Excelencia, superar las expectativas, como
hábito) & Séneca (aceptar las cosas como vienen: serenidad).
‘¿Por qué es importante cambiar?’, se
preguntaba la psicóloga Isabel Serrano. Frente a los autosabotajes (“Yo soy
así”, “No sé hacerlo”), el poder de la motivación (“Se hace camino al andar”).
La autora nos propone el modelo del ciclo evolutivo del cambio, de Kelley &
Connor:
1. Optimismo injustificado (euforia): Vamos a
por ello.
2. Pesimismo injustificado: el valle de la
deseperación.
3. Realismo motivador: ir a por el siguiente
paso, bocadito a bocadito.
4. Optimismo justificado: el momento de la
perseverancia.
5. Conclusión: celebremos los cambios.
José Antonio Marina compartía sus ‘Ideas’
sobre los “juegos políticos”: de suma cero si un@ gana y el/la otr@ pierde (el
póker, el fútbol), de suma positiva (win win) o negativa (lose lose). En
Economía se suele pensar en “suma cero” (el Estado gana, los ciudadanos
pierden). “Esto puede ser verdad cuando el gobierno es malo, no cuando es
bueno. Las sociedades inteligentes buscan acuerdos de suma positiva”.
John Carlin comparaba a Cristiano Ronaldo,
pulverizando records, con Jimmy Greaves, uno de los mejores jugadores de la
historia de Inglaterra, que marcó 366 goles entre 1957 y 1971. Jimmy sabía
reírse de sí mismo.
En clave económica y empresarial, Emilio
Ontiveros apostaba en la economía española, “huérfana de productividad”, por el
conocimiento. Nos falta especialización. “La Administración tiene que asignar
mejor los recursos a una adecuada educación e inversión en innovación”.
Absolutamente de acuerdo. Nos jugamos el futuro en ello.
Ramón Oliver se centraba en los directivos
que pasan tiempo con sus equipos: conocen mejor su empresa, valoran más el
trabajo (reconocimiento) y se ganan la confianza de los suyos: ‘Jefes que bajan
al barro’. Isabel Munera se refería a las Universidades Corporativas: ‘Cuando
la Universidad está en la oficina’, con el ejemplo de Gas Natural Fenosa desde
2000 (en la actualidad hay unas 50). Toni Ramos (UOC) ha publicado un libro
sobre los 10 casos de éxito. Algunos creemos que es el momento de reinventarlas
para acelerar la “aprendibilidad”.
Guía “gastro” de Madrid. Entre los sitios de
moda, Pipa & Co., Habanera, Marieta, La Ancha, Tragaluz, Escondite,
Cañadío, El Paraguas, Fruda, Peyote San, La Maruca, La Bien Aparecida, Quintín,
Amazónico, Ten con Ten o Fismuler.
Y música para 12 momentos que suben la
líbido. Es el estudio ‘Science behind the song’ de Daniel Müllensiefen
(Universidad de Londres) para Spotify:
- Magic, de Coldplay (Flechazo)
- Amor planetario, de Manu Carrasco (Primer
beso)
- Adagio de Simarro (Momentos románticos)
- I’ve got you under my skin’, en la versión
de Diana Krall (Seducción)
- Bohemian Rapsody, de Queen (Mejor que el
sexo)
- No ordinary love, de Sade (Slow sex)
- Feeling good, de Michael Bublé (Momento
striptease)
- Para la reconciliación apasionada: Still
loving you’, de Scorpions; ‘With or without you’ de U2 o ‘No puedo vivir sin
ti’ de Coque Malla.
- ‘Quiero más’ de Emobossa (Masaje erótico)
- ‘Je veux’ de Zaz (Happy sex)
- ‘I feel you’ de Depeche Mode (Sexo salvaje)
- ‘Je t’aime’ de Jane Birkin (Fantasear a
solas)
Hoy te toca elegir.